Como se ha dicho en alguna otra ocasión, el Manifiesto en su estado actual no es más que un primer borrador que debe ser mejorado. Una forma de hacerlo puede ser, como sugería Jaime Fernández, destacando las 3 ó 4 ideas fundamentales.
Una vez descartado el uso de otras plataformas para el debate, la forma de sugerir y votar las ideas sería la siguiente:
- Cada idea o sugerencia se debería resumir en un comentario individual, en el que la primera frase sea el título de lo propuesto.
- Si vas a proponer más de una idea, deberías dejar un comentario por cada una.
- Lee las ideas y sugerencias propuestas por los demás y vota las que te gusten (punto positivo) o indica las que no te gustan nada (punto negativo).
- Las ideas más valoradas aparecerán en el margen de la derecha y serán incorporadas con caracter preferencial.
Como punto de partida para este debate añado en los comentarios las ideas iniciales sugeridas por Jaime Fernández y las recogidas (con sus votos) en UserVoice durante el tiempo que estuvo operativo.
Acerca de @davidrjordan
Intraemprendedor Público. Investigo e intento experimentar cómo la necesidad de que la Administración y las organizaciones del sector público hagan más con menos, puede canalizarse para estimular su capacidad de adaptación y generar más valor en la sociedad aprovechando la oportunidad que brindan las nuevas corrientes socio-políticas y la web social para facilitar la transparencia, la participación y la colaboración (principios del gobierno abierto) para idear e introducir con éxito innovaciones en la gestión y la prestación de los servicios públicos.
He colaborado en el impulso, diseño y desarrollo de la iniciativa de Gobierno Abierto de la Universidad Pablo de Olavide, de Sevilla.
Desde el año 2008 participo en foros relacionados con la apertura de la Administración Pública. Soy co-fundador de la Asociación Ciudadana OpenKratio, coordinador del grupo de Gobierno Abierto de NovaGob (la Red Social de la Administración Pública) y miembro de la red internacional de expertos en gestión pública de la Fundación CEDDET, así como de la sección española de la Open Knowlegde Foundation (OKFN).
Consciente de la necesidad de mejorar la eficiencia del sector público, desde 2009 sigo y divulgo el método GTD (Getting Things Done) como vía para incrementar la productividad personal de los empleados públicos y, por consiguiente, del conjunto de sus organizaciones.
Antes de acceder al sector público, fui emprendedor en el sector TIC y ocupé diversos puestos de responsabilidad en el ámbito administrativo, técnico y comercial.
Como ponente y formador, además de divulgar sobre innovación pública y gobierno abierto, he impartido cursos y talleres sobre intraemprendizaje, productividad personal, informática de gestión y gestión presupuestaria.
Autor del blog "FunkziUni" en el que reflexiono especialmente sobre Gobierno Abierto y el enfoque GTD para la mejora de la productividad personal, así como de proyectos y actividades en las que participo.
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INprendedores Públicos 
Pingback: Decálogo del Funkzionata | Funcionarios Emprendedores (Funkzionatas)
Hola:
Yo no soy funcionario, sino empresario (por lo que ya tenéis una visión externa más de lo que me gustaría), pero me gusta vuestra iniciativa y me paso por aquí de vez en cuando. Son solo opiniones …
Algunas sugerencia:
La palabra FUNKZIONATA me parece desafortunada (yo no me adscribiría a ella). Si oficialmente soy funcionarios, yo le pondría un modificador. Manifiesto del funcionario 2.0, funcionario del siglo XXI, o funcionario excelente o ….
El mensaje, creo que tiene que ser más directo y sencillo.
No hacer solo hacer lo que me dicen, sino promover mejoras en mis áreas de trabajo.
No solo atender al ciudadano, sino ayudarle y facilitarle su objetivo.
No solo hacer lo que está bien, sino ser valiente denunciando lo que está mal.
No solo el trabajo individual, sino la colaboración y creación de redes de reputación pública.
No solo disponer de la tecnología, sino transferirla a toda la sociedad.
flexibilidad para ser reflejo de la sociedad
En el manifiesto, donde dice «… mejora de los servicios mediante la transparencia, la participación y la colaboración, compartiendo conocimiento.»
yo añadiría: y con la flexibilidad para ser reflejo de la sociedad.
Con esta frase incluimos la posibilidad al cambio de inercias, aprendizajes nuevos -las TIC, por ejemplo-, la incorporación de los idiomas cooficiales e internacionales, la responsabilidad a una posible falta de acomodo de parte del funcionariado, etc.
Aquí os dejo una propuesta de «resumen» del manifiesto. He intentado recoger las ideas presentadas en el mismo. Por supuesto cualquiera de los puntos puede modificarse, ampliarse o eliminarse según consideremos. Un saludo.
DECÁLOGO DEL FUNKZIONATA
1. El funkzionata se siente orgulloso del trabajo que desempeña porque cree en su papel como habilitador de la cohesión social y constructor diario del Estado del Bienestar.
2. El funkzionata está al lado de la ciudadanía, está para ayudarle, para servirle.
3. El funkzionata quiere y se esfuerza por conseguir un sector público de calidad donde prime la excelencia y se destierre la incompetencia.
4. El funkzionata cree que los principios que debe regir en la Administración Pública son los de transparencia, participación y colaboración.
5. El funkzionata está convencido de que la unidad básica de vida para su trabajo no es el individuo, sino la colectividad.
6. El funkzionata utiliza las Tecnologías de la Información como un medio de ampliar el alcance y efectividad de los servicios públicos.
7. El funkzionata busca compañeros dispuestos a colaborar y compartir conocimientos para conseguir una administración en red, más efectiva, más dinámica y más eficaz.
8. El funkzionata es un profesional que quiere y necesita sentirse capaz.
9. El funkzionata compromete su honor en realizar su trabajo de una forma honesta y comprometida
10. El funkzionata sabe que para poder cumplir con su sueño de una Administración mejor no puede viajar solo, debe estar acompañado por políticos y ciudadanos
Siguiendo un tweet de José A. Latorre, quizá el manifiesto debería condenar las malas prácticas (en este caso, escaqueo) y reclamar la aplicación de los procedimientos que la normativa prevé para estos casos, por ejemplo: http://twitter.com/#!/emiliojcabezas/status/33854524045139968
Hola compañeros, en principio me parece bien todo el manifiesto y los comentarios que hacéis, así como la frase el fin del día de la marmota, pero lamentablemente yo me encuentro con que las trabas vienen desde dentro si deseas participar, pedir tranparencia, trato igualitario para todos los administrados, sin amiguísmos etc. resulta que la propia organización y compañeros van a por ti. Destacar ofende y exigir que se cumplan las normas también. Al ciudadano no llegan estas guerras internas, pero lamentablemente difícilmente vamos a cambiar la imagen del funcionario al exterior, si el problema lo tenemos dentro. No os podéis ni imaginar lo desprotegidos que estamos los funcionarios cuando van a por nosotros. En la Universidad de la que soy funcionaria, últimamente les ha dado por abrir expedientes disciplinarios por cualquier motivo a todos los que no participan de sus ideas y denuncian irregularidades. Somos varios los que nos encontramos en esta situación, el acoso laboral y sicológico está a la orden del día y nadie hace nada por remediarlo. Y no hablo de expedientes por simples amonestaciones, sino de suspensión de empleo y sueldo por periodos de 3 a 6 años, que no es poco, naturalmente confiamos que al llegar al contencioso-administrativos lo ganemos pero ya sabemos lo que tardan, aprox. 2 años y mientras tanto, los funcionarios no tenemos derecho a cobrar por desempleo. ¿de qué vivimos mientras tanto?, si durante los últimos 20-30 años sólo hemos sido funcionarios, que hemos intentado hacer nuestro trabajo lo mejor posible
(que no es poco) Hasta lo que más nos «critican» la seguridad que nos proporciona el ser funcionarios, está en peligro, de ha abierto la veda con los expedientes disciplinarios. Y además la administración pleitea con dinero público y nosotros con nuestro dinero.
Saludos.
La transparencia es una de las armas que debe acabar con la situación que describes. Este tipo de conductas se deben a la opacidad que hay, desgraciadamente, en muchas administraciones públicas españolas. Además de conductas y actitudes del siglo pasado, por parte de algunos/as, que no hacen más que poner palos en las ruedas del funcionamiento de la administración pública.
El manifiesto es muy positivo y creo que debería de participar y apoyarlo un número importante de empleados públicos.
Un saludo
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El fin del día de la marmota
¡Debemos despertar ya! La Administración es criticada y atacada por la sociedad por su inmovilismo. Llevamos demasiado tiempo funcionando igual en demasiados aspectos. La evolución no puede esperar más.
Estamos orgullosos de ser funcionarios
Ser un Servidor Público (funcionario, empleado público…) es una de las profesiones más gratificantes: los empleados públicos contribuimos al desarrollo del Estado de Bienestar.
Efectivamente, creo que la segunda frase que aparece en el borrador («Existen pocas profesiones más satisfactorias que servir a los conciudadanos») es una aclaración de la primera («Los funcionarios y empleados públicos somos trabajadores privilegiados») y por lo tanto deben ir separadas por dos puntos («:»).
Además también creo que nuestro trabajo no es tanto «servir a los conciudadanos» como trabajar para el país, para el Estado, para construir el Estado de Bienestar o una idea similar.
A mi sí me gusta la idea de «servidor público»; me parece más concreto que decir que trabajamos para el «Estado»…¿Para el estado del bienestar?; pues no sé…Los estudiosos sobre la administración pública, ya llevan unos años diciendo que tenemos que hablar de Estado (o Administración) relacional, en la medida que la administración por si sola no va a tener capacidad de cumplir las expectativas que se depositan en el estado del bienestar. Bueno, el debate sería muy largo, quizá.
Volviendo a la idea de «para quien trabajo», cuando se abre el debate empresa privada-administración pública, yo suelo explicar que trabajo en una empresa muy grande, con millones de accionistas (en mi caso serían los 2 millones -casi- de habitantes de Alicante y provincia), que eligen un consejo de administración cada 4 años. Este consejo de administración, es el que -en ese tiempo- marca las pautas, pero yo no me olvido que a quien me debo es a los accionistas. Además lo maravilloso es que no hay accionistas mayoritarios, pues todos tienen el mismo capital (poder de decisión en esta gran empresa), es decir: 1 voto. Bueno, vaya rollo que dejo. No sé si se me entiende bien. Saludos: José A.
Estoy de acuerdo en la primera parte, es una aclaración y por tanto debe ir con dos puntos («:»).
Sin embargo, no me convence la idea de quitar lo de «servir a los conciudadanos», pues como dice también José A. Latorre, nos debemos a los accionistas de nuestras organizaciones (los ciudadanos). Y con la mención «partícipes directos en la construcción diaria del Estado del Bienestar» que aparece en el Manifiesto creo que es suficiente, ¿no?
No solo estamos orgullosos de ser funcionarios, los funcionarios emprendedores (funkzionatas) estamos orgullosos del trabajo que realizamos.
Sí señor! Muy buenas las dos apreciaciones que realizáis en los comentarios.
La evolución puede ser bottom-up
Los empleados públicos podemos impulsar desde las bases esta evolución. La web 2.0 nos facilita la interrelación, podemos colaborar, participar y hacerlo de forma transparente, promoviendo que cada vez se incorporen más empleados públicos pero también ciudadanos, otros profesionales y políticos.
La Administración debe evolucionar y los empleados públicos debemos participar de esta evolución. También podemos impulsarla, pero no es nuestra misión. Impulsemos la evolución, provoquémosla. Pero el impulso, o favorecer las circunstancias para que éste se produzca, corresponde a nuestros «directivos», llámense alcaldes, consejeros, directores generales o ministros.
No creo que la responsabilidad sólo sea de los dirigentes públicos. Posiblemente esa sea una de las principales causas del inamovilismo de la Administración. Estoy de acuerdo en que sería lo ideal. La evolución debería venir liderada de arriba-abajo (top-down), pero observo 2 obstáculos:
1. No todos los dirigentes públicos tienen un conocimiento suficiente de su Administración para «convencer» a los miembros de la organización; quizás haya un exceso de politización de la dirección. Lo reconozco, yo prefiero una Administración Profesional vs. Política (http://funkziuni.wordpress.com/2010/04/24/por-que-prefiero-una-administracion-profesional/).
2. Es más fácil encontrar reticencias en las personas que forman la organización si la evolución viene «impuesta» desde arriba que si es una iniciativa impulsada desde abajo. Aunque claro, para que prospere una iniciativa bottom-up sí debe contarse con el apoyo o complicidad de los líderes; no se trata de una batalla, todos tenemos el mismo objetivo.
David,
Solo quería matizar tu sentencia:
Los empleados públicos podemos impulsar desde las bases esta evolución. La web 2.0 nos facilita la interrelación, podemos colaborar, participar y hacerlo de forma transparente, promoviendo que cada vez se incorporen más empleados públicos pero también ciudadanos, otros profesionales y políticos.
Yo realizaría un pequeño cambio pero a mi juicio muy importante:
Los empleados públicos debemos impulsar desde las bases esta evolución. La web 2.0 nos facilita la interrelación, debemos colaborar, participar y hacerlo de forma transparente, promoviendo que cada vez se incorporen más empleados públicos pero también ciudadanos, otros profesionales y políticos.
La Administración Pública debe evolucionar.
Reclamamos a los gobernantes la incorporación de los principios del Open Government: transparencia, participación y colaboración; garantizando (añado ahora) el funcionamiento y la estabilidad de las políticas básicas con independencia de los cambios en sus dirigentes.
Sin dejar de parecerme bien la exigencia «hacia arriba», creo que debemos plantear compromisos que se dirijan a nuestro ámbito de competencia. Hay mucho recorrido para el oGov entre el trabajo del funcionario y la acción de gobierno del político que debe ser ejercida por nosotros y para ello, debemos alcanzar también en este lado el compromiso con los principios del OGov para permitir que cuando el «gobernante» lo «vea», el camino esté ya tan liso que le resulte fácil llegar «como si fuera idea suya».
Creemos en la Sociedad de la Información. Con tecnología, la administración será más eficiente y transparente al ciudadano.
Nos gusta el trabajo bien hecho. Somos personas con iniciativa y dispuestos a colaborar con otras personas para mejorar nuestro trabajo, en beneficio de los ciudadanos.
¿Añadir «y de nuestras instituciones» como final de la frase?. Creo que una tarea fundamental que debemos añadir a nuestra función es hacer respetar y ejercer la labor y las competencias que tiene asignada la institución/organismo en el que trabajamos y que, tantas veces, vemos utilizadas sin que el fin sea el bien común. En definitiva, que mejorar lo nuestro, es fundamental para beneficiar a los ciudadanos.
Somos empleados públicos, estamos orgullosos de serlo y de que el conjunto de nuestro trabajo sea por una sociedad mejor.